Por Lic. Wilfrido Ruiz Sainz
Tercera Parte
Desocupado Lector: En esta tercera parte de nuestro relato, te comento que nuestra intención es rehabilitar como héroe nacional la figura de General José de la Cruz Porfirio Díaz Mori. No voy ocultar nuestra propuesta para que el Gobierno de la República tramite el regreso del General, que actualmente se encuentra enterrado en el exilio, desde el 2 de Julio 1915, precisamente en el Panteón Montparnasse, Paris, Francia.
Me parece que es tiempo que Méjico y el Estado Mejicano, le reconozca al General los méritos y logros que ciertamente tuvo. Hemos de recordar que desde 1821 hasta 1877, Méjico tuvo únicamente violencia y quebrantamiento del orden social y jurídico, en perjuicio de un desarrollo equilibrado. Esto es, durante éste período no hubo progreso, sino violencia. Un Estado Mejicano en quiebra.
La visión patriótica de Don Porfirio, quizás motivada por la ambición del poder, permitió que Méjico tuviera un período de progreso y de orden, mismo que se prolongó durante 30 años. El orden y la Pax Porfiriana, permitió que Méjico creciera de manera sostenida. Estamos ciertos, que el estado actual que guarda el país, sin la etapa de progreso y estabilidad que impulsó el Porfiriato, Méjico no tendría el desarrollo que actualmente goza.
Bajo el liderazgo del General Díaz, Méjico alcanzó por primera vez, su libertad financiera, que abrió el camino hacia el progreso. Para muestra basta un botón: Cuando Don Porfirio arribó al poder, Méjico contaba con el ferrocarril rápido, el famoso Veracruzano, Ciudad de Méjico-Puerto de Veracruz. Distancia de 600 kilómetros, que recorría en cinco días. Cuando Don Porfirio abdica a la Presidencia, Méjico disponía de una comunicación ferrocarrilera de 16,000 kilómetros. Es decir, que durante su gobierno, Méjico no solamente fue reconocido diplomáticamente por las potencias de la época, sino que nuestro peso era considerado como moneda dura para las transacciones internacionales. Dicho de otra manera, Don Porfirio sacó a Méjico de la oscuridad, de la violencia y asumió su lugar en el concierto de naciones.
Me parece justo y oportuno que se reflexione. Ya es tiempo de borrar el rencor, la injusticia y el desprecio que inmerecidamente se le tiene al General Don José de la Cruz Porfirio Díaz Mori, Defensor de la Patria y Artífice del Progreso Nacional.
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